Entrevista: JOSÉ MANUEL LISTA “Aún puedo ir mucho más rápido con el Mitsubishi”

El bravo piloto de Arteixo, uno de los más rápidos y espectaculares del actual panorama automovilístico gallego, disputó esta temporada tres rallyes de asfalto a los mandos de un Mitsubishi Evo IX que había...

 

“Ahora toca evolucionar la montura con frenos más grandes y un diferencial trasero que nos permita arañar unos valiosos segundos al crono”

El bravo piloto de Arteixo, uno de los más rápidos y espectaculares del actual panorama automovilístico gallego, disputó esta temporada tres rallyes de asfalto a los mandos de un Mitsubishi Evo IX que había estrenado el año pasado en la prueba del Campeonato de España de Autocross celebrada en el circuito José Ramón Losada.

La idea original, ya desde un principio, era participar en el certámen regional de rallyes pero antes quería cumplir el sueño de correr, al menos en una ocasión, con un coche de esas características (tracción total) en “la Catedral”. Una vez realizado ese deseo, comenzaba un intenso trabajo desde cero para ponerlo a punto de cara a su participación sobre los exigentes tramos asfaltados del Campeonato Gallego.

P: Ahora que ya has decidido dar por finalizada la temporada 2015, ¿cuál es el balance general que puedes hacer de la misma?

R: Cuando haces las cosas bien y te centras al cien por cien, el resultado siempre suele ser positivo. También tengo que decir que la suerte estuvo de nuestro lado y las tres carreras que hicimos salieron de la mejor manera posible, incluso mejor de lo esperado. Puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que este ha sido mi mejor año hasta ahora.

P: En marzo disputabas la primera prueba de asfalto con el Mitsubishi, el Rallye do Cocido. ¿Cómo fue la experiencia?

R: La única pena que nos queda es que salimos en Lalín sin probar el coche en condiciones de carrera. Sólo habíamos ido un día al circuito de A Pastoriza pero, por unas cosas o por otras, no tuvimos ocasión de hacer ningún test en tramo cerrado. Ya perdimos mucho tiempo el viernes en el tramo espectáculo y, otro tanto, en el primero del sábado. A partir de ahí, ya me fui concentrando y cogiendo confianza en el coche (que, por cierto, es una maravilla) y comenzaron a salir los tiempos. Nuestro objetivo era, únicamente, rodar y hacer kilómetros sin marcarnos ninguna meta en concreto pero fuimos remontando hasta conseguir la quinta posición en la Copa Top Ten Pirelli que, para ser la primera toma de contacto real con el coche, podemos dar por buena.

P: Hasta tres meses después no volvías a competir y ya en junio llegaba la segunda cita del año: el Rallye de Narón.

R: Al volver de Lalín se nos planteó la posibilidad de salir en Noia pero, con la mente fría, decidimos no arriesgar y tomarnos la temporada con más calma. Como la celebración del Rallye de A Coruña áun estaba en el aire y queríamos hacer más carreras, nos inscribimos en Narón con la intención de seguir haciendo kilómetros y recopilar datos acerca del comportamiento del coche. Lo cierto es que ya empezamos desde el principio con mejor ritmo que en Lalín y, aunque no tomamos demasiados riesgos, finalizamos en tercera posición de la Top Ten y octavos absolutos.

P: Y, por fin, en septiembre se confirmaba la celebración del esperado Rallye de A Coruña. Ahí había que darlo todo.

R: En la carrera de casa la intención era correr de verdad, asumir riesgos y demostrar todo lo que podíamos dar de sí con el Evo, un coche que todavía  permite muchísimo más de lo que le sacamos (ahora mismo un 60 ó un 70% de su potencial). Conocíamos muy bien el terreno y, hasta el accidente que obligó a suspender el rallye, nos estábamos sintiendo muy cómodos; nos encontrábamos segundos de la Pirelli y octavos de la clasificación general y con muchas opciones de mejorar posiciones en los tramos nocturnos. El coche es una maravilla y permite ir rápido con facilidad, lo difícil es mejorar y bajar tiempos a partir de ese punto.

P: Por cierto, en la competición herculina cambiabas de copiloto, ¿cuál fue el motivo?

R: A Mauro Barreiro le surgió la posibilidad de participar a los mandos de un Mitsubishi y, por eso, recurrimos a un gran amigo y experimentado copiloto, Paco Otero. Al principio pensé que ese cambio nos iba a perjudicar porque yo quería correr desde el primer kilómetro pero nos adaptamos y compenetramos enseguida y no tuvimos ningún tipo de problema, todo lo contrario.

P: ¿Cuáles son las diferencias del Lancer con respecto a los otros vehículos que habías pilotado anteriormente?

R: Es otro mundo. Está a un nivel muy superior tanto económicamente como por conducción. Exige mucho más y obliga a tener unas notas muy buenas que requieren llevar al lado a un copiloto que sepa muy bien lo que hace. Tengo muy claro que este año fue una toma de contacto y que no pude arriesgar todo lo que me hubiera gustado porque el dinero sale, prácticamente en su totalidad, de mi bolsillo y una salida de pista o rotura no habría sido asumible. Como decía antes, creo que aún le puedo sacar mucho más partido porque, ahora mismo, estoy a un 70% de su potencial. La idea que tengo en mente es aprovechar estos próximos meses para hacer algún curso de conducción que complemente todos los consejos que me están dando Sergio Vallejo, Roberto Blach y Marcos Canedo. Todos ellos son grandes pilotos que me están ayudando mucho porque piensan que todavía puedo evolucionar bastante, tanto a nivel de conducción (dónde debo frenar, acelerar…) como con los reglajes idóneos para cada situación.

P: ¿Podemos avanzar alguno de los planes que tienes de cara a la próxima campaña?

R: Pues sí porque en el equipo ya tenemos la mente totalmente puesta en la temporada 2016 aunque, realmente, la situación está complicada. No podemos ni debemos quejarnos pues ya tenemos bastante suerte al poder correr con un coche de estas características pero sólo haremos las carreras que nos permita el presupuesto: tres, cuatro… no sé, las que podamos; cuantas más mejor. Lo bueno es que parece que algunos patrocinadores se están animando y nos van a apoyar en la medida de sus posibilidades. En Lalín estaremos con toda seguridad pero a partir de ahí… ya se verá. No nos planteamos seguir el Campeonato al completo, pero ya no sólo por motivos económicos, sino porque el trabajo no nos lo permite. No obstante, también me gustaría salir en alguna prueba del Nacional, por ejemplo, en Ferrol.

Oscar Romero / periodista del motor